6 Grados de separación
Incontables razones para acercarnos
En un mundo de 8.000 millones de habitantes, solo 5 personas te separan de cualquier otro habitante del planeta. Según la conocida teoría de los 6 grados de separación, a través de 5 personas podemos tener relación con figuras como Obama, Rosalía, el Papa o Vandana Shiva. También con una agricultora de Perú, con una trabajadora de la industria textil de Bangladesh, con una defensora de derechos humanos en Colombia o con una estudiante en Ghana. Si tu cabeza no ha estallado aún, ¡compruébalo!
DESCUBRE TU GRADO DE SEPARACIÓN CON...
Como acabas de constatar, ni las grandes distancias, ni la diversidad de lenguas y culturas, ni los niveles socioecónomicos impiden que la humanidad esté conectada. Sin embargo, por muy paradójico que parezca, hemos creado un mundo que nos separa y que genera desigualdades y vulneraciones de derechos humanos. No todas las personas tenemos las mismas oportunidades para vivir una vida que merezca ser vivida. Aunque hay una buena noticia: podemos cambiar esta realidad.
Las políticas de cooperación y las ONG de desarrollo vascas llevamos décadas equilibrando la balanza para construir una sociedad más justa para todas las personas y en todos los lugares. Tanto las instituciones como la sociedad tenemos que trabajar para equilibrar esta realidad que nos afecta a todas y todos. Porque lo que le afecta a ella, te afecta a ti, me afecta a mí y afecta al mundo. Conocer otras realidades y descubrir el papel que tiene Euskadi en el mundo es el primer paso para ser parte del cambio.
PRESUPUESTOS DE COOPERACIÓN EN EUSKADI A LO LARGO DE LOS AÑOS
El compromiso internacional de los países más desarrollados ante la ONU y el de la Ley Vasca de Cooperación, señalan que las instituciones vascas deben destinar a cooperación el 0,7% del producto interior bruto vasco.
En las últimas décadas, las instituciones vascas han sido un referente en políticas de cooperación internacional tanto por las cantidades destinadas a ese fin como por sus planteamientos y enfoques innovadores y transformadores.
No obstante, en la actualidad están perdiendo su posición de liderazgo porque los presupuesto destinados a ese fin están estancados y porque están aún lejos de su capacidad real para invertir en solidaridad internacional.
¿Y si en vez de desear que las cosas sucedan haces que sucedan las cosas que deseas?
UNA MIRADA AL PASADO, PRESENTE Y FUTURO DEL TRABAJO CONJUNTO
En el Estado, mientras algunas comunidades autónomas muestran un crecimiento en la inversión en cooperación, Euskadi permanece en una inquietante situación de estancamiento.
La media de los países donantes es del 0,37 %. Hasta el momento, Euskadi está muy lejos de esa media y del compromiso de Naciones Unidas (0,7%). Confiamos en que la nueva Ley de Cooperación y Solidaridad sea el revulsivo necesario para que esta situación se revierta.
Lo que nos está distanciando
Sabemos que hay factores que nos separan de alcanzar una vida digna y justa para todo el mundo.
AGENDA 2030 en euskadi
En 2015, los 193 países de Naciones Unidas acordaron dar un paso firme hacia un mundo más justo, ecológico, próspero y pacífico. Asumieron la conocida Agenda 2030, que está basada en 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible que deben alcanzarse en el año 2030. Su objetivo es lograr un mundo y una vida sostenible, así como erradicar la pobreza.
Este es un reto para los gobiernos de todo el mundo, pero también para nuestras instituciones más cercanas como el gobierno autonómico, las diputaciones forales y los ayuntamientos. Además, implica a empresas, universidades, agentes sociales o entidades de todo tipo y en todo el mundo y, por supuesto, a todas las personas.
Un Objetivo de Desarrollo Sostenible clave: el Nº 17
Vivimos en un planeta injusto y con grandes desigualdades y vulneraciones de derechos humanos. Para revertirlo, este objetivo 17 propone tejer una robusta alianza mundial para lograr un desarrollo sostenible que equilibre la balanza hacia la justicia social y que los países más desarrollados cumplan su compromiso de trabajar junto a las zonas más empobrecidas del mundo, destinando a cooperación internacional el 0,7% de su ingreso nacional bruto para contribuir a garantizar los derechos humanos y a acabar con la pobreza y las desigualdades, entre otras acciones.
La Agenda 2030 vuelve a poner sobre la mesa la necesidad de cumplir el histórico compromiso internacional de destinar a cooperación internacional ese 0,7%; un compromiso que la ciudadanía vasca ha apoyado desde hace décadas en las calles y ha demandado a las instituciones públicas.
TODAS A UNA
Una política al servicio de las personas y del planeta. Queremos darle la vuelta al mundo y construir sociedades más justas donde nadie quede al margen, por lo que necesitamos políticas al servicio de las personas y del planeta. Para alcanzar ese fin, todo suma.
LAS ONGD
Somos una pieza fundamental en las políticas vascas de cooperación.
LA CIUDADANÍA
Todas las personas somos protagonistas de los cambios sociales que queremos ver en el mundo.
LAS INSTITUCIONES PÚBLICAS
¿En qué sentido mejora la vida de las personas las políticas de cooperación?
Las instituciones públicas deben promover leyes que impulsen la cooperación internacional para fomentar un mundo más justo y sostenible.
En ese sentido, el 15 de febrero de 2024, el Parlamento Vasco ha aprobado una nueva Ley Vasca de Cooperación y Solidaridad, que busca abordar eficazmente los desafíos globales. Refuerza el compromiso solidario de Euskadi con los países empobrecidos, fomenta alianzas y mejora la coordinación y la financiación. También incluye el mandato de destinar el 0,7 % del presupuesto consolidado a cooperación internacional, en coherencia con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas, y es uno de los aspectos más relevantes de una norma que pretende ser transformadora y referente.
Además de un compromiso ético, es más que un porcentaje: es una declaración de intenciones sobre el papel que quiere desempeñar Euskadi en el mundo actual.
PROPUESTAS PARA TRANSFORMAR EL MUNDO
Las ONG de desarrollo y cooperación internacional trabajamos para transformar el mundo, partiendo de nuestro ámbito más cercano. Sembramos semillas que logran cambios a escala global. Algunas de nuestras propuestas para cambiar el rumbo al que se dirige el mundo y para construir otro tipo de sociedad son las siguientes.